El enfermo deambula o vaga sin rumbo ni objetivo, sin que exista una razón aparente; va y viene, o se empeña en marcharse y se hace difícil mantenerlo en casa. Algunos enfermos andan de forma enérgica y sincopada, y cuando van acompañados es difícil seguirles el ritmo. La deambulación errante o vagabundeo puede ser la expresión por parte del enfermo de la necesidad que siente de hacer cosas, de que está aburrido o necesita ejercicio.
A veces esta conducta se relaciona con una reacción catastrófica, incluso a algo insignificante, que el sujeto no es capaz de interpretar y ante lo cual y debido al miedo, decide huir. En ocasiones puede perderse y luego marcharse sin rumbo. El hecho de que se desoriente y se pierda puede generar una crisis de ansiedad y miedo.
La deambulación errante genera peligros por la posibilidad de pérdida o por los peligros propios de la calle (vehículos, semáforos, animales,…). Si la deambulación errante tiene lugar por la noche, los peligros aumentan y los problemas ocasionados a la familia son especialmente graves. Esta conducta puede agravarse en el caso de cambios de domicilio, o incluso cambios en el entorno, como puede ser obras en la calle, pues no lo reconoce como propio.
Consejos:
- Para que el enfermo sea identificado, es importante que lleve una medalla, plaqueta o brazalete con su nombre y dirección y la inscripción “tengo problemas de memoria”. Estas inscripciones ayudarán a localizar le en caso de que se pierda.
- Es importante que lleve siempre en su cartera o monedero una tarjeta con su nombre, su dirección y su número de teléfono.
- Evitar al máximo los cambios de domicilio y las reformas en el mismo.
- Evitar viajes o visitas largas innecesarias. Un viaje a lugares no familiares puede ser fatal para la estabilidad del enfermo.
- Rodear al enfermo con los objetos que le sean familiares.
- Modificar el entorno para dar la máxima seguridad. Controlar las ventanas. Instalar cerraduras de seguridad.
- Informar a vecinos y comerciantes por si ven le sólo por la calle.
- Colocar letreros que orienten al paciente en casa.
- Aprovechar para salir a pasear cuando aparezca la conducta de deambulación.